La marca de pasta de dientes Jack & Jill nace en Melbourne, Australia. Es un negocio familiar que surge al tener el primer hijo, y comenzar con las preocupaciones sobre los efectos directos del medioambiente en la salud infantil, asi como evitar la exposición a aditivos químicos innecesarios. Ante la frustración de no encontrar productos en el mercado, el padre de familia que es farmacéutico se pone manos a la obra para desarrollar fórmulas seguras para la salud de los peques.
Los cepillos son compostables y biodegradables. El mango ergonómico está hecho 100% de almidón de maíz. Para reciclarlo se rompe la cabeza y se recicla según los programas de cada localidad y el mango de almidón puede colocarse en el abono y en 90 dias se descompone.