¿Estás pensando usar pañales de tela para tu bebé?
Enhorabuena, es una decisión estupenda, tanto para tu bebé, como para tu economía, además de para el planeta.
Pero cuando empiezas a buscar información sobre pañales de tela, te encuentras con una enorme cantidad de tipos, siglas, nombres que son difíciles de entender.
Por eso hoy quiero explicarte, de un modo muy rápido y sencillo, qué tipos de pañales de tela existen, para que sepas identificarlos y elegir los más convenientes para vosotros.
Pero antes, quisiera dejarte claro todo lo bueno, y lo no tan bueno, de usar este tipo de pañales.
✅ Ventajas de usar pañales reutilizables
¿Buscas razones para empezar a usar pañales de tela? Perfecto, voy a darte unas cuantas.
➡️ Son más saludables para tu bebé
Porque están hechos con materiales que permiten la transpiración de la piel de bebé, como el algodón, el cáñamo, el bambú o la microfibra.
Piénsalo por ti misma: ¿sudas más con un impermeable de plástico o con una sudadera de algodón?
➡️ Te ayudan a contener el gasto que supone tener un hijo
En los 2 años y medio que tú bebe usará pañal, necesitarás entre 7.000 y 7.500 pañales desechables.
La media de lo que cuesta un pañal desechable son 0,25 céntimos. El cálculo es fácil: 7500 pañales x 0.25€ = 1.875 € de gasto en pañales desechables.
Usando 25 pañales de tela, que cuestan una media de 25 €/pañal, gastarás en total 625 €. Ya te has ahorrado 1250€. Y encima, te valen para un segundo bebé, así que el ahorro es doble.
Si además te animas a revenderlos cuando ya no los uses, puedes recuperar parte de la inversión.
➡️ Son mucho más ecológicos que los pañales desechables
El gasto de agua, luz y detergente al hacer la colada no llega, ni de lejos, al precio de los pañales desechables.
Además los pañales puedes lavarlos junto con las toallas o ropa de cama, reduciendo el número de lavadoras a la semana.
Para que te resulte de lo más sencillo, aquí tienes mis consejos para facilitar al máximo el lavado de los pañales de tela.
Ni que decirte sobre el tiempo que tarda en degradarse un pañal de usar y tirar, a menos que sea biodegradable, tarda una media de 300 años en degradarse.
¿Quieres saber más?
✅ Inconvenientes de los pañales de tela
Básicamente, las desventajas de los pañales de tela giran en torno a su uso y al precio.
Tienes que comprarlos todos de una vez (o casi)
Vale, parece más barato comprar un paquete de 20 o 30 pañales desechables cada vez que los necesites que comprar de golpe los 25 pañales de tela que hemos visto que puedes necesitar.
Tienes que pensar en el ahorro a largo plazo, esos 1250€ de diferencia.
Además, no tienes que comprar todo el pack; yo te recomiendo que vayas haciendo tu “ajuar” de pañales poco a poco, para probar distintos sistemas y marcas.
También puedes sugerirlo a tu familia o amigos cuando te pregunten qué necesitas para el bebé. En Granujas puedes hacer tu lista de nacimiento, ;te doy muchas más ideas en el artículo sobre las mejores ideas para pasar un buen postparto.
Así podrás comprobar cuáles os van mejor en cada situación.
Hay que “aprender a usarlos”
Los pañales desechables se ponen y se tiran. Fin. Los pañales de tela te hacen “investigar” un poco antes de usarlos (por eso estás leyendo este post ¿verdad? 😉 )
Esta parte va a dejar de preocuparte en cuanto termines de leer este artículo, así que no me voy a extender mucho más por ahora. 😊
Abultan más que los pañales desechables
Personalmente, a mí me encanta ver esos culetes de tela tan mullidos. <3
Así que no me parece un problema, porque es algo tan simple de resolver como ponerle al bebé ropa más grande.
Para aprovechar los bodies que ya tienes, puedes usar un extensor que alarga el cuerpo de la prenda; así no tienes que cambiarlos de golpe.
Y ahora, vamos al tema, que tienes que aclararte con estos pañales de una vez.
✅ ¿Qué tipos de pañales de tela existen?
Vamos a ver, paso a paso, cómo aclararse dentro del montón de pañales que puedes encontrar en el mercado.
Para ello vamos a fijarnos, básicamente, en tres aspectos:
- Las partes de un pañal de tela.
- Los tipos de pañales que puedes elegir.
- Las tallas de los distintos pañales.
Verás que teniendo claras solo estas tres cosas, ya sabrás manejarte en este campo como una profesional.
➡️ ¿Cuántas partes tiene un pañal de tela?
Esto es supersencillo, porque solo son dos: un pañal de tela está compuesto por absorbente y cobertor.
- El absorbente: para que te hagas una idea, es como una compresa. Esta parte absorbente es la que está en contacto con el bebé y absorbe el pipí. Se usan distintos materiales para fabricarlos: algodón, bambú, soja, cáñamo o microfibra o una mezcla de varios de estos materiales.
- El cobertor: sería la braga donde pones la compresa. Pero en el caso de los pañales, esta parte exterior es impermeable, para evitar los escapes. Generalmente está fabricada de poliuretano (lo verás escrito normalmente como PUL) o de lana.
Teniendo claras estas dos partes, te será mucho más fácil diferenciar los tipos de pañales.
➡️ ¿Cuántos tipos de pañales de tela existen?
La clasificación es sencilla, porque se basa en cómo están unidos el absorbente y el cobertor.
- Todo en 1 (TE1): absorbente y cobertor están unidos, son una pieza única que no se puede separar.
Puedes ver un ejemplo en este vídeo en el que te enseño los Todo en 1 de la marca Tot Bots.
Si te interesan estos pañales, aquí tienes una amplia selección, ya me dirás qué estampado te gusta más ¡son preciosos!
- Todo en 2 (TE2): el absorbente se une al cobertor mediante corchetes u otro sistema similar; se puede desmontar separando el cobertor del absorbente.
Todo en 2 son, por ejemplo, los pañales Pop In que te enseño en este vídeo.Si te gusta más este sistema de pañales, te dejo un montón entre los que elegir.
- Rellenable: el cobertor tiene una “bolsa” interior de tela en la que introduces el absorbente.
Lo puedes ver en este vídeo en el que te enseño los pañales rellenables de la marca Tucuxí.
¿Qué te han parecido? Si quieres ver más, aquí tienes una amplia selección.
- Ajustable: el absorbente es un pañal en sí, es decir, que todo el pañal es absorbente. Entonces hay que cubrirlo con un cobertor impermeable para que no empape la ropa.
- Gasas: las gasas son lo que toda la vida se llamó “picos”. Es una tela fina, generalmente de algodón y/o bambú, que se coloca en el culete del bebé a modo de pañal.
Se cierra con una pinza especial (antes los cerraban con imperdibles) y encima se coloca un cobertor impermeable.
También puedes doblarlas para usarlas como absorbente dentro de un pañal rellenable.
Mira, aquí lo puedes ver en detalle:
Esta es una opción más económica que los absorbentes actuales, e igual de funcional. Puedes elegir entre unos u otros en este enlace.
➡️ ¿Qué tallas de pañales de tela hay?
Esto es como los cargadores de los móviles. 😉 No hay nada estandarizado, cada marca tiene sus medidas.
Pero, como es lógico, las tallas van acorde con el peso del bebé, desde recién nacido hasta que deje el pañal.
También hay muchas marcas que tienen modelos unitalla.
Esto quiere decir que el pañal “crece” al ritmo de tu bebé; tienen sistemas que permiten reducirlos de tamaño (sobre todo de longitud), para que puedas utilizarlos desde los 5,5 kg hasta que deje el pañal (en la mayoría de los casos).
✅ ¿Cuántos pañales de tela necesito para un bebé?
Esto, como imaginas, no es una ciencia exacta, porque depende de tu bebé, de tus rutinas de lavado, etc.
Pero te puedo decir que lo normal es que necesites alrededor de 20-25 pañales.
Pero esto no significa que necesites 25 pañales completos.
Según el tipo de pañal que uses, el cobertor se puede reutilizar (si no está sucio) y cambiar solo en absorbente.
Por ejemplo, si usas pañales Todo en 2, puedes tener menos pañales, pero más absorbentes o gasas.
✅ ¿Te han quedado claros los tipos de pañales de tela que hay?
Ya has visto que aclararse con los de pañales de tela no es tan complicado.
Pero por si necesitas profundizar un poco más, aquí tienes mi Mega Guía de Pañales de Tela, para que no te quede ninguna duda.
Si aún hay algo que no te queda del todo claro, puedes preguntarme, estaré encantada de convencerte de que entres en la tribu de las madres pañaleras.
Y ¡ojo, que esto engancha!